Salones del Reino para un millón de Testigos
Entre los años 1999 y 2015, los testigos de Jehová construyeron más de 5.000 Salones del Reino en Centroamérica y México. a Y aún se necesitan más de 700 nuevos salones para el millón de Testigos que vive en esta zona y las demás personas que asisten a nuestras reuniones.
En el pasado, a las congregaciones de esta parte del mundo se les hacía difícil construir salones. En México, por ejemplo, la mayoría de los Testigos celebraban las reuniones en casas particulares. ¿Por qué? Una de las razones es que, durante muchos años, la ley prohibió a las organizaciones religiosas adquirir propiedades. Pero en los años noventa cambió la ley, y los testigos de Jehová empezaron a edificar muchos Salones del Reino. Aun así, la construcción de cada uno de ellos normalmente tomaba meses.
Un gran progreso
El proceso se aceleró en 1999, cuando se puso en marcha un nuevo programa; los Grupos de Construcción de Salones del Reino comenzaron a hacer salones en zonas de recursos limitados, lo que incluía México y los siete países de Centroamérica. Desde el 2010, la sucursal que se encuentra en México ha supervisado los trabajos de construcción de toda la zona.
Los siervos de construcción se enfrentan a retos singulares cuando construyen salones en zonas de difícil acceso. Ese fue el caso de unos siervos de construcción en Panamá, que tuvieron que viajar en botes por el mar durante unas tres horas para llegar al lugar de la obra. Y en el estado mexicano de Chiapas, el grupo de construcción tuvo que usar una avioneta para llevar materiales a una zona apartada.
Resultados positivos
A menudo, incluso las personas que no son Testigos tienen ganas de ver un nuevo Salón del Reino en su comunidad. Por ejemplo, un hombre de Honduras dijo que antes de que los Testigos construyeran un salón en un terreno de la zona donde vive, hubo muchas personas que le preguntaron por ese terreno porque querían hacer allí una discoteca. Pero a él no le gustaba la idea. Por eso, cuando los Testigos le dijeron que pensaban construir un Salón del Reino en ese lugar, exclamó: “¡Qué bendición!”.
En muchos lugares, a las personas les llama la atención ver lo duro que trabajan los Testigos. Un hombre de Guatemala dijo: “Culturalmente las mujeres solo trabajan en la cocina. Pero en la construcción de su Salón del Reino hombres y mujeres han trabajado igual. Me impresiona ver a las mujeres armando armaduras de hierro y repellando [o enyesando] paredes. Esto es impresionante”. Algunos vecinos incluso han tomado la iniciativa de comprar comida y bebida para los trabajadores del proyecto.
A muchas personas les atrae el diseño de nuestros Salones del Reino. En Nicaragua, un ingeniero le comentó al alcalde de un municipio que el Salón del Reino era un edificio bonito y estaba construido con materiales de buena calidad. De hecho, dijo que en toda la comunidad no había una estructura con esa calidad de construcción.
Por supuesto, a los testigos de Jehová también les encanta tener lugares dignos para adorar a Dios. Se han fijado en que las personas que están estudiando la Biblia están más dispuestas a asistir a las reuniones cuando se construye un salón nuevo. Los Testigos de una congregación de México que ayudaron a los siervos de construcción a edificar un Salón del Reino expresaron así su gratitud: “Agradecemos a Jehová por este privilegio que nos dio de construir un hermoso salón para su honra y gloria”.
a Según el Diccionario panhispánico de dudas, Centroamérica está formada por Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá.